Como ha quedado LIBIA




 

"No necesitamos donantes"



"No necesitamos donantes. Libia es un país rico. Los activos estatales de la Autoridad de Inversiones Libia, el Banco Central y las reservas en oro equivalen a US$168.000 millones", declaró el ex director del Banco Central libio, Farhat Bengdara

De lo que nadie duda es de que Libia va a necesitar contratar empresas extranjeras para la reconstrucción. Además, sus enormes reservas internacionales y su abundante petróleo, hacen que la cuestión sea potencialmente muy lucrativa.

Conscientes de ello, recientemente, el presidente del CNT, Mustafa Abdel Jalil, prometió favorecer a los países que ayudaron en la rebelión. "Lo gestionaremos de acuerdo con el apoyo que nos han brindado", dijo.



Rusia presente


No hace mucho tiempo, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, se preguntaba quién había autorizado a la OTAN a buscar la salida del poder de Kadafi. Este jueves, no obstante, Moscú anunció que reconoce al Consejo Nacional de Transición como la legítima autoridad.

No eran pocos los que daban por hecho que las nuevas autoridades libias pasarían factura a países como China y Rusia por su falta de apoyo a la intervención de la OTAN.

De hecho, entre los propios rusos algunos temían ser grandes perjudicados del cambio de régimen.

Empresas como Gazprom o Tatneft han invertido cientos de millones en el sector del gas y el petróleo libio. Y la estatal ferroviaria rusa estaba construyendo una línea de tren de alta velocidad entre Sirte y Bengasi gracias a un contrato de US$3.000 millones ganado durante el gobierno de Kadafi.

"No creo que el nuevo gobierno de Libia empiece revisando los contratos con Rusia por cuestiones políticas más que criterios técnicos o económicos", dijo Mikhail Margelov, enviado ruso a la conferencia de París.

China también quiere estar ahí


Las empresas chinas también tenían una fuerte presencia en Libia antes de que estallara la rebelión. Al menos 26 compañías hacían negocios por unos US$20.000 millones.

El gobierno chino en todo momento se mostró reticente a la acción impulsada por Francia y Reino Unido.

Pero Pekín se ha hecho presente en la reunión.

"China desea sumarse a la comunidad internacional y jugar un rol activo en la reconstrucción de Libia", declaró el portavoz de la cancillería china, Ma Zhaoxu.

Pekín envió a un viceministro a la conferencia de París con la intención de "apoyar a las partes en sus esfuerzos para restaurar la estabilidad y promover una transición tranquila".

Italia firma acuerdo


Italia podría tener razones para estar preocupada por sus intereses económicos en Libia.

Las aparentes buenas relaciones entre el primer ministro Silvio Berlusconi y el coronel Kadafi podrían causar dificultades a la antigua potencia colonial frente a las nuevas autoridades libias.

La petrolera italiana Eni, que está presente en Libia desde 1959 (diez años antes de la llegada de Kadafi al poder), se considera a sí misma la primera compañía internacional en términos de producción de hidrocarburos del país.

Eni firmó un memorándum de entendimiento con el CNT, donde ambas partes se comprometieron a "recrear las condiciones para una rápida y completa reanudación de las actividades de la compañía petrolera en Libia y a trabajar para la reactivación del gasoducto GreenStream", que proveía 8.000 millones de metros cúbicos de gas natural al año.

Los italianos se comprometen inicialmente a proveer hidrocarburos para satisfacer las necesidades inmediatas de la población. Igualmente ofrecerán asistencia técnica para ayudar a restaurar el funcionamiento de las instalaciones.